Capt. 2 Vitacora 1
CONTEMPLACIÓN
La melancolía de un día lluvioso a tocado hoy a mi puerta, no es tristeza pero definitivamente siento en mi esta sensación intensa como si tuviera un violín de fondo, el sonido de las gotas tocando la ventana y la paz melancólica que consigo traen. Hoy acompañada por el té de menta de cada noche y la esponjosa mantita azul de lana que tanto me gusta me siento extraña y cambiante…. cabeza, rodillas, muslos y cadera…
La enseñanza que Lina me trajo de la contemplación, quedo grabada en mi mente como una idea inmortal, escucharme y sentirme debería ser parte de las necesidades básicas, entendiendo necesidad básica a los elementos mínimos indispensables que los seres humanos necesitamos para vivir. Partiendo de esto he pensado mucho en que la mayoría del tiempo no nos damos lo que necesitamos porque no aprendemos a escuchar nuestro cuerpo, vivimos en un sistema que nos dice que es lo mejor para nosotros pero ni el sistema tiene la culpa ni el tubo tubo la culpa jajajajaja, simplemente le damos la responsabilidad de nuestro bienestar a cualquier cosa fuera de nosotros y pareciera mucho más fácil darle la responsabilidad de mi vida a otro pero no lo es, delegar mis necesidades a otro y no darme lo que necesito trae consigo costes enormes difíciles de explicar, yo por ejemplo por mucho tiempo deje que mi pareja se encargara de mi, de mi amor, mi felicidad, mis necesidades más básicas como comer o amar, hace pocos meses lo vi, siempre teniendo conflictos con él hasta ver que no puedo entender al otro sin entenderme a mí, no puedo escuchar al otro sin escucharme a mí, no puedo ver al otro sin verme a mí y así mismo no puedo juzgar al otro sin antes juzgarme a mí. Echar pa’ dentro fue ver que todo lo que me molesta de él (o de cualquier persona), es realmente algo que me molesta de mi y así mismo todo lo que amo del otro es lo que amo profundamente de mi y luego… BOoOoOM!!!.
En la vida Hay muchas preguntas y pocas respuestas, la mayoría no sabemos para donde vamos, pero debería bastar con saber de dónde venimos y entender porque estamos en donde estamos, las respuestas de todo siempre están en nosotros, tan simple como un ejercicio que Lina compartió en clase, vamos a hacerlo…
Tienes una situación y dos posibles soluciones entonces coge papel y lápiz, solo necesitas un pedacito chiquito y en un papelito escribe una posible solución y en el otro la otra posible solución, luego enrollas los papelitos y los pones en tu mano y cierras los ojos mientras las revuelves en tus manos, tomate un minuto para revolver los papelitos en tus manos (entonces te darás cuenta que mientras tengas tus ojos cerrados con las dos respuestas en tus manos hay una por la cual sientes mas afinidad, entonces estarás pensando en cual te inclinas mas y te gustaría que salga), entonces ahí tú tienes la respuesta a todos tus problemas, situaciones o dificultades, realmente el papelito que saliera no tiene ninguna importancia pues en tu interior ya tenias la respuesta!. Por último es lindo entender que no existen buenas o malas decisiones porque siempre vamos a llegar al mismo lugar del que queremos huir, diría yo, solo hazlo con estilo! y ama el preciso instante en el que estas ahora que es perfectísimo al igual que las decisiones que tomes!
TE AMO!
